Te busqué de nuevo,
te busque mil veces
sin obtener respuesta.
Como prenda única en fondo de armario,
como boceto inacabado,
como dedo ensangrentado
me llega la imagen de ti.
De tez risueña y salvaje al mismo tiempo,
me dejó una huella tan profunda…….
Como una cruz clavada en el alma,
aparecía como un Dios en mi sueño aletargado,
Y tu voz, suena hoy igual que ayer,
Y tu figura se desdibuja,
se diluye,
como espuma de mar.
Y te evaporas finalmente,
en mitad de la nada
para dar paso al eterno olvido.
Sara Rivera
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